
Exposición de la Experiencia Estética: PESADILLAS ANTES DE NAVIDAD
Ficha Técnica. La película surgió de la fantástica imaginación del director Tim Burton que, junto con su amigo el músico y compositor Danny Elfman, logró hacer realidad en un plazo de tres años. En los años noventa la técnica del stop-motion aún era experimental y fue la elegida para llevar a cabo la película. Hasta el estreno, la animación por stop-motion pocas veces había sido utilizada como la gran protagonista de un largometraje. Su utilización se limitaba a unos pocos momentos ocasionales. Con Pesadillas antes de Navidad, la stop-motion (técnica de animación que consiste en aparentar el movimiento de objetos estáticos capturando fotografías. En general se denomina animaciones de stop motion a las que no entran en la categoría de dibujo animado, esto es, que no fueron dibujadas ni pintadas, sino que fueron creadas tomando imágenes de la realidad) alcanza unas cotas de perfección nunca vistas, tanto en su técnica como en su utilización para narrar una historia. Tim Burton usó también esta técnica con la anterior película James y el melocotón gigante, más adelante, en 2005 salió La Novia Cadáver. Junto con éstas películas se aprecia cómo la técnica ha ido evolucionando hasta alcanzar cotas de gran perfección amenazando a la producción animada.
A partir de un poema de tres páginas que él mismo había escrito, Tim Burton construyó esta singular visión de las dos épocas del año que más le fascinaban de niño: la fiesta de Halloween y la Navidad. El espectador asiste sin interrupción a un soberbio espectáculo que combina la grandilocuencia de los grandes musicales del Hollywood clásico con la iconografía gótica tan del gusto de Burton.
Historia. Su argumento es sumamente original e inédito.
En Halloweentown, Jack Skeletor es el Rey de las Calabazas. Cansado de liderar cada año la fiesta de Halloween, la curiosidad le lleva a visitar un día la fiesta de la Navidad. Fascinado por ella desea conocer el significado de la Navidad, pero al no encontrarlo decide secuestrar a Santa Claus y celebrarla a su manera. Pero las consecuencias que ello produce le harán comprender que se trata de algo bastante más complicado a lo que los habitantes de Halloweentown suponían en un principio y finalmente se da cuenta de que su lugar está en Halloweetown y seguir siendo tal cual es: el Rey del Mal.
¿Por qué esta película?
Lo que más me ha llamado la atención es el cambio moral de la película. Al ser una historia hecha para el público infantil aunque también para el adulto, Tim Burton ha alterado un concepto básico de cualquier película infantil. Se nos enseña desde pequeños que los protagonistas siempre han de ser buenos, esperanzadores, con fuerza de voluntad y el querer hacer las cosas bien, por lo tanto son los que ganan; por otro lado, los antagonistas, los malos, son caprichosos, mal pensados, dramáticos, frívolos… y por lo tanto, han de perder. Tim Burton ha roto con este prototipo básico moralizante y ha escogido a un protagonista donde se sintetizan características de ambos bandos: Jack es un personaje desgarbado, feo, maléfico, caprichoso y que se sobreestima a sí mismo; sin embargo, a medida que pasa la película, se nos muestra a un personaje de sentimientos humanos (buenos y malos), piensa de manera coherente aunque con algún que otro arrebato caprichoso, es algo inocente e infantil lo que le impulsa a realizar acciones que no siempre están bien…
Otro aspecto que hay que tener en cuenta, es que el espectador debe aceptar al protagonista tal y como es. El ambiente que rodea la historia es tétrico y con tintes góticos, con una puesta en escena de edificios en diagonal, puntiagudos y mal proporcionados y un paisaje fantástico y abracadabrante. Ello nos obliga a introducirnos en un mundo caótico y fantástico, totalmente ilusorio y por lo tanto contrario al nuestro. Es una película que no desea convencer al espectador mostrándole una vía visual con la que identificarse, este ha de acostumbrarse a un mundo totalmente irreal y ficticio en el que sin embargo, sus personajes no son tan diferentes a nosotros. Este aspecto hace que la película se sitúe por encima de otras como Monstruos S.A. (donde los protagonistas, más que monstruos parecen peluches).
La música y la letra de las canciones son totalmente novedosas para una película infantil pues tienen cierta evocación a lo gótico y maléfico que acompañan perfectamente al desarrollo de la historia. Las canciones poseen una letra que describe sentimientos frustrantes y emociones variadas pero con una forma de expresarse comprensible para un público de todas las edades.